El pianista del Ghetto de Varsovia...

Desde siempre en mi grupo de amigos han resaltado dos características, la mayoría son hombres y siempre hay gente que es mayor que yo.
A veces me pongo a buscarle explicaciones y bueno, la de la primera es muy fácil. Por alguna extraña razón circundante en este cosmos las mujeres tendemos a competir de una manera implícita. A lo que me refiero es que es muy frecuente ver amigas celosas o envidiosas o en situaciones de ese tipo y eso solo llega a cambiar conforme uno va madurando aunque hay gente que se queda verde, je! No pasa con todas las amigas, de hecho tengo algunas muy buena amigas (las quiero muchísimo!), pero a lo que voy es que si pasa a nadie le extraña.
Con respecto a la gente mayor divagué bastante y llegué a una conclusión: "...dos generaciones menos, dos generaciones más... fechas tan solo fechas..."
Hay tantas cosas que aprender, q a veces esos años que le llevan a una se convierten en abismos de conocimiento en los que me encanta sumergirme. Por ejemplo mis abuelos en todos esos dichos y todas las enseñanzas que al final tienen razón.
Es simple, soy feliz con gente "más vieja". Me encanta aprender todas las cosas que tienen para enseñarme y escuchar las historias que van desde la gracia a la reflexión.
A veces me duele aceptarlo, pero es cierto que las personas con más camino recorrido pueden llamarme la atención y en la mayoría de los casos van a tener razón. Y es que qué puedo aprender de alguien que va por el mismo tramo del camino o más atrás? Puede que si existan algunas cosas, pero en su mayoría están igual que una o más perdidos. Con los años todo va cambiando. La gente adquiere conocimiento del tipo que más ocupa, el “conocimiento para ir por la vida”. Las personas mayores son como un baúl lleno de mapas y recetas para andar por la vida en forma inteligente sacándole provecho a lo que se tiene y creando nuevos caminos por los cuales andar.
Es que una arruguita no significa solo años, sino experiencias y un año más no solo nos hace más viejos, sino más sabios, (me decían alguna vez Flavia y Belén).
Hoy saludo y agradezco a esos amigos que me han ido enseñando cosas por la vida y me han servido de ejemplo para caminar sin perderme y me han dejado abrir su baúl y leer esos mapas para ver por donde ir y por donde no.
Además quiero agradecer a todos los que visitan el blog y leen mis pensamientos que se quedan aquí. Muchos aportan cosas que me alegran el día o me ponen a pensar en el rumbo que está siguiendo mi cauce.
Y Facu, no estás más viejo... solo más sabio, ja! Feliz Cumple! te quiero!!